Ya van días sin ver tus grandes ojos, sin escuchar tu risa loca, los vasos lloran la ausencia de copas, la hora de la cena se ha vuelto ha guardar dentro de botellas, la ciudad parece un mundo, la casa un universo y la cama un desierto, no estas y pareciera como si yo tampoco existiera, creo que en estos momentos hasta la casa se sostiene en recuerdos, mi idiotez habitual me hace brindar con el vacío, tú no estas y yo hablo como si estuvieras.
martes, junio 03, 2008
Suscribirse a:
Comentarios de la entrada (Atom)
No hay comentarios.:
Publicar un comentario