Mis zapatos negros y radiantes
Mi mirada curda tan común
en las mañanas
Mi corazón obscuro e insanable
Mis manos torpes y tan grandes
Mi manía de recordar
solo lo bueno
Mi simpleza y tu complejidad
Mi camisa y tus botones
Mi cama y tu silencio
Tus bailes y mis celos
Tu maldita iniciativa de volar
Tus mentiras que son mi verdad
Tu arte ya tan lejos de mi ta-lento
Tu intento y yo tan desatento
Tu sinceridad hoy tan brutal
Quizás simplemente
Naciste mucho antes
Mi vida gastada en la cornisa
Contra tu insaciable búsqueda de equilibro
Mis botellas vacías
Y las palabras que dejas en el aire
Mi auxilio y tu indiferencia
O quizás sea tu cansancio
Y sigo acá justificándote todo
Tu mi melancolía
Y yo tu peor recuerdo
Tus historias falsas
Y mis venganza
Tu intento de
justificar tu ausencia
Y mí agotado esfuerzo de amarrarte
Tus ojos en la espalda
Y mi vida ya gastada
Será realmente que ya
No nos quedan palabras…
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