miércoles, octubre 01, 2008

Ausencia


La ausencia se presenta como un grito mudo, inconsolable, hoy la soledad me ha dejado inmóvil, nunca desde los años que empezamos a vivir juntos me había abrazado tan fuerte, sentí su pecho hueco resonando bajo el torpe paso que tanto caracteriza el corazón de los bailarines solitarios, por primera vez vi las arrugas de esta mujer, ella mi primera musa, incansable me seguía a todas partes, hoy su vestido azul que ha inundado siempre mis casas, se ve de un terciopelo viejo, cansado de luchar contra polillas de años que parecen siglos, de días que parecen años, hoy Soledad sonríe delicadamente como un demonio y siento sus manos empuñándose en mi espalda.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Tú abrazo me quita el aliento

Tú mirada atraviesa mis sentidos

Tú aroma queda impregnado en mi piel como un suave delirio

Cada encuentro paraliza el tiempo

Siento que tú eres y por eso cada vez que me llamas te sigo

Sí estás aburrido de estar sólo, sí quieres vivir libre de ausencias
deberías intentar cambiarlo, con quien sea… eso lo decides tú

No vuelvas sin razón… canta Cerati!!!

Y yo digo que…

Todo no puede en vano