Como quien borda un pañuelo, fui perdiendo en cada puntada un deseo, la esterilla absorbía mis palabras, los besos que no te procure, las mañanas que despertarías a mi lado, todo se fue quedando ahí, como hilitos de colores, punto a punto, deseo a deseo fui perdiendo, como un abanico olvidado en un asiento, tan cotidiana se hizo esta ausencia, que cada vez que terminaba de bordar tu rostro, debía deshacer hilo a hilo, punto a punto, esa imagen que me llenaba de deseos.
miércoles, octubre 01, 2008
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1 comentario:
Una manera preciosa de describir el sentimiento... lo entiendo y no lo quiero para mi, asi como nadie en el momento en que llega..
Hay que seguir bordando.. me hiciste acordar a una peli hermosa y no puedo recordar su nombre... ufff.. me da rabia eso!!!... se que porsupuesto tenia que ver con los hilos de la vida.. y habia muchos telares, y se tejian cosas hermosas!! uff.. bueno, si hago buena memoria vuelvo! beso, Vero.
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